Lucrecia Rodrigo |
Los Cuatro de Córdoba |
Claudio Juárez, luego de dar el tradicional grito, expresaba a viva voz: “Cosquin, empieza a cantar”.
El característico himno, invitaba a la danza del Ballet Camin, que luego realizó un homenaje a Marina Tondini y Hugo Jiménez, fundadores del Ballet Salta. Estos bailarines deleitaron con una zamba: “Salta lo ve bailar” dedicada a ellos.
El Director de este elenco, Profesor Hugo West, recibió una distinción de la CIF UNESCO, como Reconocimiento y Membresía de Honor. Premio muy merecido para los coscoínos.
El Atahualpa Yupanqui entonces, recibía a Los 4 de Córdoba, quienes se encuentran festejando sus 50 años con la música.
“Juntos, comenzamos” cantaban, proyectando fotos de su larga trayectoria. No faltaron “Zamba de Alberdi”, “El Olvidao”, “La Oma”, “Soy cordobés” entre otros temas. En esta celebración estuvieron invitados: cuatro médicos, que en su juventud fueron músicos, Los Nombradores del Alba, el Negro Videla, Sergio Galleguillo, Destino San Javier, Lucio Rojas, Guillermo Novelli (La Mosca), Chaco Andrada y Diego Leguizamón (La Callejera), Alejandro Mondelo y Pity Fernández (Las Pastillas del Abuelo) y Por siempre Tucu, con quienes compartieron diferentes temas. Culminaron todos juntos con el candombe “Negro José”, coreado y palmeado por los presentes. Los artistas recibieron todo el cariño del público.
Desde el Litoral, se sumaba a la fiesta la Delegación de Entre Ríos, trayendo distintos ritmos que caracterizan su identidad sonora, como chamarritas, chamamés y rasguido doble, transmitida por sus músicos, bailarines y recitadores.
Por siempre Tucu, infaltables en este Festival, entonaron canciones del repertorio popular, muy bien recibidas por la platea.
Hermanados por el canto, la Delegación de Japón, presentaba a los ganadores del certamen realizado en Kawamata. El dúo interpretó un tema instrumental y Shimauta, en japonés y español, palmeada por los presentes. Los artistas se hicieron acreedores del tradicional poncho coscoíno.
La numerosa Delegación de Salta, invitó a recorrer La Linda, con danzas, música a cargo de Mariana Cayón, Peñeros, Seres, Kaymanta, Los Rengifo, Lautaro Damico y Dardo Valerio, transmitiendo todo el acervo cultural de esa provincia.
La noche continuó con la presentación del espectáculo “Pampas”, a cargo de Ángela Irene y Lucrecia Rodrigo. Se escucharon temas como “Canción del centauro” “Huella de Ida y Vuelta” y otros del nuevo material de Lucrecia “El Baile Pampa”: “Como en antes” junto a una pareja de baile, cosechando calurosos aplausos.
Santiago del Estero, estuvo muy bien representada por Los Carabajal, quienes siempre brindan un emotivo show. En esta oportunidad, presentaron temas de su nuevo trabajo, en el que reivindican a los pueblos originarios y un adelanto de lo que será su película “La historia de una familia que canta”. Y… cuando ellos se presentan, nadie queda en su butaca. El público pobló los pasillos, bailando y cantando al compás de cada interpretación. Un encuentro que se renueva en cada presentación.
Y del mismo terrunio, Martín Paz, se presentaba como solista. Con una nueva formación compartió “Otoño y flor”, “Zamba de tu adiós” y “Eterno amor” entre otras, reafirmando su calidad de cantautor popular.
Los Ganadores del Pre Cosquin, también tuvieron su espacio. Los jóvenes integrantes del Conjunto Instrumental de la Sede Resistencia, Chaco, Nuevo Tiempo, compartieron su particular estilo, llevándose los aplausos de la platea.
Y en esta noche de historias y recuerdos, Los Manseros Santiagueños, festejaban sus 60 años. Onofre Paz, Alito Toledo y Hugo Reynoso, rememoraron canciones como “Sinfonía silvestre”, “Canto a Monte Quemado” y “Semillas de chacarera”.
Tuvieron como invitada a Marcela Morelo, con quien entonaron: “Desde siempre y para siempre” y “Para los ojos más bellos” y con Néstor Garnica, “Huaycohondo y “Añoranzas”. Los artistas fueron ovacionados por la Próspero Molina, quien reitero el pedido de otras.
Con el corazón y los oídos plenos de música, el público comenzaba a retirarse, después de haber disfrutado de una noche de emociones y festejos.